“Carece en lo fundamental de una argumentación política capaz de dar salida a este conflicto”, “se circunscribió a dos de los puntos de nuestro pliego petitorio: el relacionado con los presos políticos en México y la derogación de los artículos 145 y 145 bis del Código Penal” y las soluciones que ofrece a estos puntos son insatisfactorias.
Agregó que Díaz Ordaz, como ya lo habían hecho Corona del Rosal y Echeverría, “se refirió al diálogo en tono abstracto, en el que nada se concretaba, en el que nada quedaba definido”.
Concluyó: “No vamos a dialogar con la presión de los tanques y las bayonetas encima, nosotros no entendemos el lenguaje de las ‘orugas’; retiren los tanques de las calles, retiren el ejército de la calle, retiren todos los provocadores y todas las fuerzas de choque que vestidas de civiles atacan a nuestras brigadas de la calle, y entonces públicamente estaremos dispuestos a dialogar y a debatir, antes no”.
“Nuestro movimiento, por ello, no es una algarada estudiantil más; esto debe comprenderse muy bien por quienes se obstinan en querer ajustar sus nuevas realidades a los viejos sistemas obsoletos de su ‘revolución mexicana’, y de su ‘régimen constitucional’, de su ‘sistema de garantías’ y otros conceptos vacíos, engañosos, de contenido opuesto a lo que expresan”.
El presidente “sólo dejó una disyuntiva a quienes desde el Zócalo hemos exigido una respuesta a las demandas con concentraciones populares: o aceptamos sus ‘soluciones’ sin seguir presionando; o se reprime, ahora en definitiva, este movimiento popular apelando al ejército, la marina y la aviación (...) Negamos que por nuestra parte existan presiones ilegítimas hacia el gobierno; pero la falta de respuesta a una demanda lleva necesariamente a la acción popular: única vía que queda abierta ante un régimen sordo y mudo (...) La disyuntiva que se nos plantea entre aceptar sus soluciones o esperar la represión total… Hasta hoy no hemos recibido otra respuesta que el aumento de la represión, las amenazas y las calumnias que pretenden cambiar la opinión pública para volverla desfavorable a nosotros (...) El gobierno puede solucionar este prolongado conflicto cuando quiera. Nosotros siempre hemos estado dispuestos a hacerlo”.
Y, a manera de confirmación de dicha disposición, el CNH propone que el diálogo:
1) Se base en el pliego petitorio.
2) Se desarrolle exclusivamente entre los representantes del Poder Ejecutivo y los del CNH.
3) Se inicie en la Unidad del Congreso del Centro Médico del IMSS el día lunes 9 de septiembre a las 5 de la tarde.
4) Se efectúe ante la presencia del CNH en pleno, la Coalición de Profesores de Enseñanza Media y Superior Pro Libertades Democráticas, la prensa nacional e internacional y los asesores que ambas partes consideren pertinentes.
5) Sea transmitido por Radio Nacional y Telesistema Mexicano. Si esta proposición no es considerada conveniente por el Poder Ejecutivo, el CNH, asienta, está dispuesto a discutir otras propuestas.
La Unión Nacional de Mujeres Mexicanas respondió en una carta al informe presidencial, señalando que en representación de las mujeres “a quienes hemos visto sufrir graves daños en estos días, que sí hemos sido soezmente vejadas; que sí hemos sido injuriadas; que sí hemos sido ofendidas de palabra y de hecho, amenazadas, detenidas injustamente, pero en ningún caso los culpables han sido los estudiantes, compañeros, hijos, hermanos nuestros; quienes nos han golpeado y atropellado han sido el ejército y los miembros de las fuerzas represivas que se desataron desde fines de julio sobre los estudiantes y el pueblo capitalino”.
Cerca del mediodía, varios grupos de estudiantes fueron a la Procuraduría del DF para solicitar la libertad de sus compañeros detenidos. Se les informó que este día se había puesto en libertad a 96 estudiantes, a quienes se les advirtió que los expedientes correspondientes a su arresto quedarían en reserva, “empero, si persisten en su conducta y reinciden en algunos delitos de los que se les acusa o cometen otros, se ejercerá acción penal en su contra”.
La CTM, en manifiesto a la nación, declaró: “Extranjeros y malos mexicanos, actuando como activos agentes comunistas, aprovecharon reyertas sin importancia de dos pequeños grupos de estudiantes para desatar la más grave acometida en contra del régimen y de las instituciones del país, adoptando para el caso, tácticas que son un remedo de sistemas adoptados por extremistas de esas tendencias, en otros confines y, muy recientemente en los disturbios de París (...) no existe un problema estudiantil real. No se han planteado demandas con ningún contenido de esa naturaleza (...) Se insiste en los más absurdos planteamientos y se exigen condiciones tan degradantes, que siendo en apariencia pueriles por absurdas, lo que buscan en realidad es evitar que haya materia para diálogo alguno, ya que el propósito es quebrantar todo principio de autoridad”. Agregó su adhesión lambiscona a Díaz Ordaz y se sumó a las peticiones formuladas por éste a los estudiantes “para que vuelvan al camino de la razón y el orden, expulsen de sus filas a los políticos resentidos, a los agentes nacionales o extranjeros que atienden intereses extraños a México”, y que “para el caso de que no se recapacite en la acción subversiva, la CTM manifiesta su determinación de participar, con todo sus efectos, en la acción sindical que sea necesaria, en el tono, grado y con las consecuencias que sean requeridas, para dar fin al clima antijurídico y de anarquía (...) y destruir a los agitadores nativos o extranjeros”.
En un boletín firmado por la Coalición de Generaciones de Maestros del IPN se pidió a estudiantes y maestros que, entre otras acciones, denuncien a las “personas o grupos que tratan de exacerbar los ánimos con tendencia a hacer chocar la masa estudiantil con la doctrina y línea política del presidente, expresada en su IV informe”.
El jefe de la policía del DF, Luis Cueto, declaró que la “Jefatura de Policía tiene instrucciones terminantes para no permitir ningún acto que altere el orden público y que esté fuera de la ley”, y “permanecerá a la expectativa para reprimir cualquier acto de agresión”. Notificó que “ayer a las once de la mañana, personal de la Dirección General de Tránsito detuvo a once estudiantes de la Escuela de Agricultura de Chapingo, a quienes se sorprendió repartiendo propaganda subversiva”. Tres de los detenidos pertenecían al Comité de Huelga de Chapingo.
Seguían las detenciones y el clima de hostigamiento: varios tipos armados retiraron carteles del CNH de los alrededores de la Escuela Nacional de San Carlos y dispararon al aire, a manera de intimidación.
El informe de la Femospp asienta que “en Azcapotzalco una camioneta del Jardín Botánico, en la que se transportaba una brigada política de la Facultad de Ciencias de la UNAM fue atacada a tiros por un grupo de desconocidos que viajaban en un automóvil sin placas; en Buenavista fueron secuestrados tres estudiantes por la policía; un estudiante de Derecho fue golpeado por desconocidos cuando repartía propaganda a los taxistas en la Avenida Insurgentes; una brigada de estudiantes de Físico Matemáticas del IPN fue disuelta por granaderos cuando celebraba un mitin en el mercado Morelos”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario